Yo había escrito con anterioridad que la oposición tenía problemas para convencer al electorado de los problemas de la gestión de Maduro. Su estrategias comunicacional y política son erráticas por ser generoso y los problemas internos no ayudan a convencer a un electorado que todavía tiene dudas sobre como se comportaría la oposición de llegar a Miraflores. Esto ayudó a explicar en gran parte el porqué del fracaso del "referendum" que intentó hacer la oposición con las elecciones municipales de Diciembre de 2013.
Mucho ha pasado desde entonces, las protestas de febrero, la re-organizacion de la MUD, la continuación de los problemas que tiene Venezuela, a pesar de esto la oposición sigue sin capitalizar mucho este descontento. Es mas A PESAR de la oposición la popularidad de Maduro ha seguido bajando consistentemente hasta el punto que ya todas las encuestadoras, tengan estas sesgo pro-opositor, pro-gobierno, o no tengan sesgos (definido este sesgo según los análisis de elecciones pasadas realizados en este blog), le dan a Maduro niveles de desaprobación por encima del 50% (ver figura 1). Ademas de esto, las encuestadoras también han comenzado a dar numero de aprobación que llegan hasta un 30%, alcanzando así a las encuestadoras con sesgo pro-opositor que daban estos números desde el principio (Ver figura 2).
Figura 1 Datos de Evaluación de Gestión Negativa y Predicción Lineal, por Sesgo
Tabla 1 Regresión Lineal de Evaluación de Gestión
En la Tabla 1 entonces se puede observar que igual que en análisis previos las encuestadoras con sesgo Pro-Oposición difieren considerablemente de aquellas con sesgo Pro-Gobierno y las de encuestadoras sin sesgo. Una encuestadora Pro-Oposición le da a Maduro 13 puntos menos de gestión positiva (poniéndolo en 37% en lugar de 50%) mientras que le dan 9 puntos porcentuales más de gestión negativa (poniéndolo así en 49% en lugar de 40%) esto claro sin contar el número de días. El efecto del numero de días es positivo para la evaluación negativa, es decir que mientras mas días pasan mas aumenta la evaluación negativa (a un ritmo de 4 puntos porcentuales cada 10 días, o 12 al mes). En términos de la evaluación positiva el numero de días afecta de forma negativa disminuyendo la aprobación presidencial (a un ritmo de 2 puntos porcentuales cada 10 días, o 6 al mes).
Para tratar de entender el comportamiento tan claro de aumento constante de la evaluación negativa de gestión obtuve, basado en el modelo lineal, unas predicciones de evaluación negativa de gestión. Esta serie pase a compararla con dos indicadores económicos, inflación (figura 3), valor del dólar paralelo (figura 4).
Como se puede observar en la figura 3 el indice de precios al consumidor es errático en su subida y bajada, aunque tiene una tendencia clara de aumento que sigue la evolución de la desaprobación presidencial.
La figura 4 sin embargo, que compara la desaprobación con el valor del dólar paralelo muestra una relación mucho mas clara entre los dos indicadores.
Los resultados de la Tabla 2 dan cuenta del efecto altamente significativo del dólar paralelo en el aumento del indice de desaprobación del primer mandatario. El indice de inflación por el contrario, solo ayuda modestamente una vez el efecto del dólar paralelo se tiene en cuenta. Las variables que demarcan los periodos politicos de Maduro no tienen ningún efecto.
Estos modelos muestran claramente la relación entre el deterioro de la economía y el descontento con la gestión del Presidente Maduro. Claro está es necesario hacer una aclaratoria final, dirigida especialmente a aquellos que ven esto y automáticamente traducen eso en una derrota electoral del oficialismo. Ese análisis es errado por simplista, un evento electoral no solo activaría la maquinaria del chavismo sino que reactivaría la dicotomía gobierno-oposición que hasta ahora no ha beneficiado mucho a esta ya que los independientes (que siguen siendo un tercio del electorado) han favorecido al chavismo. Para que la oposición pueda capitalizar este descontento con la gestión gubernamental deben poder presentarse como alternativa coherente y con un plan claro de acciones a tomar y dejar de ser y parecer erráticos en el rumbo que quieren darle al país.